El concepto de zombis ha fascinado a la humanidad durante siglos, y en los últimos años se ha visto un aumento en la popularidad gracias a programas como “Los muertos vivientes” y películas como “tierra de zombis" y "Shaun de los Muertos.Pero, ¿hay algo de verdad en la idea de que los humanos se conviertan en zombis? En este artículo, exploraremos las posibilidades científicas detrás de la existencia de los zombis y profundizaremos en varias enfermedades y fenómenos que exhiben rasgos similares a los de los zombis. ¡Así que toma tu kit de supervivencia y sumerjámonos en el mundo de los muertos vivientes!

Los orígenes de los zombis
La idea de los zombis se originó en Haití durante los siglos XVII y XVIII. Se creía que los esclavos traídos de África se liberaban de la esclavitud al morir y regresar a África. Sin embargo, con el tiempo, el concepto evolucionó y se fusionó con las prácticas vudú. Los haitianos comenzaron a creer que los muertos vivientes estaban hechizados para realizar tareas malvadas, lo que dio origen a las leyendas de los zombis. Se cree que la palabra "zombie" se deriva de la palabra Kongo "nzambi", que significa "espíritu de una persona muerta".
Zombis ficticios contra zombis de la vida real
Mientras que los zombis ficticios a menudo se representan como cadáveres reanimados con un hambre insaciable de carne, los zombis de la vida real no son exactamente lo mismo. En realidad, existen varias enfermedades y condiciones que pueden causar rasgos similares a los de los zombis en los humanos. Exploremos algunos de ellos:
Síndrome de Kluver-Bucy: un estado similar a un zombi
El síndrome de Kluver-Bucy es un trastorno neurológico raro que puede dejar a sus víctimas en un estado de zombi. Las personas con este síndrome presentan varios síntomas, que incluyen hiperoralidad (ponerse objetos inapropiados en la boca), incapacidad para reconocer objetos, distracción, demencia e incluso comportamiento violento. El síndrome es causado por una disfunción en la amígdala, la parte del cerebro responsable de los instintos de supervivencia, las emociones y la memoria. Sin el control del lóbulo frontal, la amígdala se hace cargo, lo que resulta en un comportamiento anormal que recuerda a los zombis.
Encefalitis letárgica: la enfermedad del sueño
La encefalitis letárgica, también conocida como “enfermedad del sueño”, es una condición neurológica extremadamente rara. Se observó por primera vez durante la epidemia de gripe española en 1918. Las personas afectadas por esta enfermedad experimentan síntomas como alucinaciones, estupor, catatonia y andares arrastrados, parecidos a los zombis representados en películas como “28 días después”. Aunque se desconoce la causa exacta de la encefalitis letárgica, se cree que se desencadena por una respuesta autoinmune a una infección.
Parásitos y Control Mental
La naturaleza misma proporciona ejemplos de fenómenos similares a zombis. Un ejemplo de ello es un hongo del género Ophiocordyceps que infecta a los insectos y se apodera de sus cuerpos. El hongo manipula el comportamiento del huésped, obligándolo a subir a un lugar elevado, donde el hongo puede esparcir esporas y continuar su ciclo de vida. Este mecanismo de control mental es inquietantemente similar al concepto de zombis en la cultura popular.
La posibilidad de un apocalipsis zombie
Con la fascinación por los zombis, es natural preguntarse si es posible un apocalipsis zombi en la vida real. La verdad es que, si bien las enfermedades y afecciones pueden crear síntomas parecidos a los de los zombis, es muy poco probable que se produzca un apocalipsis zombi en toda regla. La transmisión y supervivencia del virus zombie ficticio requieren condiciones específicas que no están presentes en la realidad.
Pandemias virales: una preocupación más realista
En lugar de preocuparse por los zombis, es más prudente centrarse en amenazas reales como las pandemias virales. La historia nos ha mostrado el impacto devastador de enfermedades como la gripe española y brotes más recientes como el ébola y COVID-19. Estas pandemias pueden perturbar la sociedad, provocando pánico y caos. Si bien es posible que los individuos infectados no se conviertan en monstruos hambrientos de carne, las consecuencias pueden ser nefastas.
Preparación para Emergencias
Ya sea un apocalipsis zombie o una pandemia viral, estar preparado para las emergencias siempre es una decisión acertada. Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) incluso ofrecen una guía irónica de preparación para el apocalipsis zombie. Si bien puede parecer una broma, la guía brinda valiosos consejos para la preparación general ante emergencias. Recomienda crear un plan de emergencia, abastecerse de elementos esenciales como alimentos, agua y medicamentos, y tener un comunicación estrategia en su lugar. Al estar preparado para los peores escenarios, puede garantizar su seguridad y el bienestar de sus seres queridos en cualquier situación de emergencia.

Conclusión
Mientras que los zombis ficticios continúan cautivando nuestra imaginación, la existencia de los zombis de la vida real se limita a enfermedades raras y fenómenos naturales. Condiciones como el síndrome de Kluver-Bucy y la encefalitis letárgica pueden causar rasgos similares a los de los zombis en las personas, pero un apocalipsis zombi a gran escala es muy poco probable. En su lugar, debemos centrarnos en preocupaciones más realistas como las pandemias virales y estar preparados para emergencias con la planificación y los suministros adecuados. Entonces, aunque los muertos no se levanten de sus tumbas, siempre es mejor prevenir que lamentar ante cualquier crisis. Manténgase preparado, manténgase informado y recuerde, es solo ficción... ¿o no?